Me presento, soy la doctora Sandra Acevedo Gallegos, soy médico ginecoobstetra egresada de la UMAE 23 del IMSS en Monterrey NL, y médico materno fetal egresada del Instituto Nacional de Perinatología.
Recibí una invitación para colaborar con temas que pueden resultar de interés para pacientes embarazadas. Me propuse iniciar esta serie de artículos con una explicación de lo que hacemos los médicos materno fetales. He ejercido la medicina materno fetal por 24 años y aún me enfrento ante la pregunta: ¿y usted qué hace doctora?, ¿porqué mi médico me envía con usted? y es aquí donde empieza la explicación:
-Yo soy un médico que evalúa a pacientes embarazadas de alto riesgo
-Ah ¿es ginecóloga?
-Bueno si, la primera especialidad que estudié fue ginecoobstetricia; pero actualmente me dedico a revisar a los fetos por ultrasonido
-Ah ¿entonces es ultrasonografista?
-No realmente, después de terminar ginecología y obstetricia estudié una segunda especialidad, que antes se llamaba medicina perinatal, pero que desde el año 1998 se reconoció como medicina materno fetal.
Especialidad nueva
La medicina materno fetal es una especialidad relativamente nueva, los primeros especialistas en esta área se dieron a conocer en la 1970 en Estados Unidos. Son 50 años, pero en comparación con el tiempo de existencia de otras especialidades son muy pocos; es por eso que el conocimiento de la misma aún es pobre.
La especialidad troncal para ingresar a la especialidad de medicina materno fetal es ginecología y obstetricia, especialidad que dura 4 años, y luego se realizan 2 años de la segunda especialidad. Así que en total un médico que egresa de la licenciatura en medicina debe estudiar un mínimo de 6 años antes de ser médico materno fetal.
El médico materno fetal se encarga del cuidado de la paciente embarazada de alto riesgo, es decir de la mujer que tiene enfermedades ya conocidas y se embaraza: mujeres con diabetes, presión elevada, obesas, con enfermedades del riñón, enfermedades de la tiroides, enfermedades autoinmunes o cáncer, por nombrar algunas. O mujeres que se embarazan y luego se enferman de hipertensión gestacional, preeclampsia, diabetes del embarazo, entre otras. Además es especialista en la evaluación del feto por ultrasonido, realiza evaluaciones detalladas de la anatomía del feto durante los tres trimestres de la gestación así como de los riesgos para enfermar durante su desarrollo, de tal manera que no solo describe los datos anormales en un feto, sino que puede integrar un diagnóstico, establecer los estudios que requerirá más delante, realizar el seguimiento adecuado y coordinarse con otros especialistas en el caso de que el feto requiera un tratamiento dentro del útero.
El médico materno fetal:
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Establece riesgos individuales para el feto y para la madre
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Sugiere medidas preventivas de acuerdo a los riesgos detectados
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Realiza ultrasonidos especializados (revisiones ampliadas de las estructuras fetales)
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Integra equipos multidisciplinarios para atender a la madre y a su bebé y colabora para llevar el embarazo al mejor término posible.
Toda mujer embarazada debería tener al menos una evaluación por un médico materno fetal, quien colabora con su obstetra para establecer estrategias de vigilancia, medidas preventivas, tratamientos oportunos y tiempos adecuados para la terminación del embarazo, con el objetivo de que éste termine de la mejor forma posible tanto para mamá como para bebé.
En los siguientes artículos iremos desmenuzando toda esta información. Es vital y trascendente que toda mujer embarazada conozca el estado de su bebé y que acuda a cada una de las evaluaciones a lo largo del embarazo.
La siguiente entrega tratará de la evaluación del embarazo en el primer trimestre.
Espero que la información que encuentren en estos artículos les sea de gran utilidad, sabiendo de antemano que todo lo escrito es esta serie estará basado en la mejor evidencia científica posible y en menor grado en la experiencia obtenida en mis años de ejercicio profesional.
Hasta la próxima