“La tasa global de complicaciones después  de la artoscopia de cadera fue del 7.2%, que es superior a lo que se ha descrito previamente en la literatura e un 1.5%”, comentó el autor principal de la investigación, Chritopher Larson, Director General del Instituto Minnesota de Medicina Ortopédica Deportiva de Minneapolis.

 

Entre enero del 2011 y abril del 2012, el equipo de investigación evaluó 573 individuos (287 varones y 286 mujeres) con una media de edad de 32.3 años, que se hallan sometido a una artroscopia de cadera, que es mínimamente invasivo. Mediante un artroscopio se hace un examen y en algunas ocasiones, el tratamiento de daños en el interior de una articulación.

 

“Nuestro ensayo multicéntrico es uno de los primeros en evaluar las tasas de complicaciones para todos los procedimientos artroscópicos de cadera utilizando un esquema de clasificación que evalúa la posibilidad de complicaciones a partir de datos demográficos y quirúrgicos. Informes previos sobre las complicaciones son anteriores a las nuevas técnicas quirúrgicas, como la reparación del labrum y el tratamiento del pinzamiento femoroacetabular (FAI) o no estaban completos”, explica.

 

Datos como el diagnóstico, la información demográfica y procedimientos se registraron, además de que se utilizó una clasificación validada de las complicaciones de clasificación para todos los pacientes de forma prospectiva.

 

“El evento adverso más común después de la cirugía (22.7% de las caderas) era de trastornos sensitivos en la pierna posoperatorios, que persistió más de seis meses en cuatro caderas y fue considerado una secuela en lugar de una complicación. No hubo diferencias en las complicaciones entre los hombres frente a las mujeres en la primaria revisión ni en la reparación del labrum versus, el desbridamiento y el IMC”, finalizó Larson.

(Con información de EuropaPress)